– Curar las heridas del pasado con el Munay-Ki

Las profecías de las antiguas Américas hablan de un periodo de grandes transformaciones y predicen la aparición de nuevos seres humanos en el planeta, personas de sabiduría y poder que viven libres de temor y se aferran a su naturaleza eterna, aceptando la administración de toda la creación.

Basados en las prácticas iniciáticas de los chamanes de los Andes y el Amazonas, los Munay-Ki son diez ritos de iniciación para convertirse en una persona de sabiduría y poder. Son transmisiones energéticas que curan las heridas del pasado, la herencia genética y kármica con la que nacemos. Transforman y actualizan el campo energético luminoso y reinforman nuestro ADN, permitiéndonos crear un nuevo cuerpo que envejece, se cura y muere de forma diferente.

Los ritos de los Munay-Ki son: El Rito del Sanador, Las Bandas de Poder, El Rito de la Armonía, El Rito del Vidente, El Rito del Guardián del Día, El Rito del Guardián de la Sabiduría, El Rito del Guardián de la Tierra, El Rito del Guardián de las Estrellas, El Rito del Creador y el Rito del Útero.

Estos ritos fueron transmitidos por primera vez a los antiguos maestros por seres angélicos, y ahora se transmiten de maestro a alumno en forma de semillas. Una vez que otra persona te regala estas semillas, depende de ti que se conviertan en árboles frutales. La tradicional
ceremonia del fuego
-a veces en forma de simples velas blancas- se utiliza para hacer crecer sus ritos una vez recibidos. Al recibir y regalar estos ritos, sentirás la presencia del linaje contigo: los luminosos que trabajan desde el mundo espiritual.

Estos ritos no son sólo etapas de iniciación, sino posibles pasos para la evolución de la humanidad. Mientras las naciones luchan por trozos de territorio y se disputan la tierra, debemos encontrar la sabiduría para crear la paz entre todos los pueblos. Mientras nuestros telescopios espaciales nos muestran imágenes de un Universo vasto e inconmensurable, debemos encontrar una historia humana que incluya a las estrellas. Y a medida que aumenta nuestra capacidad de destruir el mundo, estamos llamados a asumir la tarea de custodiar toda la creación.

En esencia, los ritos tienen que ver con la administración. No son premios al ego ni reconocimiento de ningún tipo de logro, ni hacen especial a nadie. Al contrario, le restan importancia. Sólo entonces, desde una posición de no-ego, podremos ser verdaderamente útiles.

En lengua quechua, «Munay» significa amor universal. «Ki» proviene de la palabra japonesa que significa energía. Juntas, estas palabras significan energía de amor. Después de pasar por los nueve ritos del Munay-Ki, puedes empezar a soñar con la creación del mundo que queremos que hereden los hijos de nuestros hijos.

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