¿Le suena familiar? ¿Estás atascado en Internet y viendo las noticias aunque sabes que perderás la noción del tiempo y te encontrarás deprimido y ansioso al final del día? Este es el segundo regalo porque casi nadie se acuerda de buscar la belleza más que un instante fugaz. Recordar que hay que centrarse en la belleza es especialmente difícil en una cultura que valora las expresiones ingeniosas de cinismo y en la que «las noticias» son una repetición interminable de imágenes aterradoras. Es fácil caer en una espiral negativa. encontrando conspiraciones y amenazas por todas partes.
¿Qué podemos hacer para detener la espiral descendente? Detente, tómate un momento y encuentra algo bello nada más levantarte. En lugar de encender la televisión o mirar el móvil, sal a dar un paseo o tómate unos minutos para meditar. Cierra los ojos y despeja la mente. Entonces abre los ojos con la expectativa de encontrar belleza en el cielo, o en el viento o en la lluvia. Ver la belleza no es un acto pasivo. Requiere pausa y atención para ver la belleza a tu alrededor. Es tomarse tiempo para sentarse y contemplar una puesta de sol.
Ver la belleza también es un acto de valentía. Cuando señalamos la belleza a alguien, nos arriesgamos. Puede que gruñan explicando por qué no durará, por qué seguro que se desvanecerá o por qué no es tan importante como limpiar ese desastre de ahí. O tal vez le alegres el día a un compañero de viaje que también esté cansado de tanta fealdad y negatividad y te encuentre como una luz en la oscuridad. Quizá te llenes de energía y encuentres tiempo para leer cuentos a los niños o ayudar a un vecino mayor con las tareas domésticas. Las posibilidades son infinitas si abrazas con valentía la belleza.
Empezar el día buscando la belleza te permite adentrarte en la intemporalidad. Puedes saborear el infinito y tocar tu propia mortalidad. En lugar de estar atrapado en una espiral descendente sintiéndote abrumado, tendrás tiempo para reír, tiempo para meditar, tiempo para ayudar a los demás. Estás transformando el mapa que llevas dentro de ti de la realidad. A medida que llenas de belleza tu mapa interior, tu mundo exterior también experimenta una transformación. Internet y las noticias, las teorías de la conspiración comienzan a desvanecerse. Las personas negativas ya no te consideran interesante.
El poder de la belleza es la capacidad de co-crear con la Luz Primordial. La belleza son los colores, la realidad es el lienzo, y tú eres el pincel con el que salpicas la luz de muchos matices y sueñas con que el mundo se haga realidad. Esta es tu sagrada tarea, completar la creación con belleza, en la belleza, desde la belleza. Hazte el juramento de encontrar algo bello cada día, algo que te haga sonreír, algo que puedas compartir.
¿Puedes encontrar la belleza y compartir tu alegría con alguien hoy?
