-NAVEGAR POR EL MUNDO SUPERIOR

 

En blogs recientes hemos repasado la diferencia entre destino y futuro, rastreado líneas temporales, explorado el túnel del impulso, identificado vacas sagradas y discutido la llamada del destino. Pronto tendrás la oportunidad de viajar para recuperar tu destino, pero primero quiero que te familiarices con el Mundo Superior, el dominio invisible de nuestro destino y espíritu -o lo que la psiquiatría denomina el superconsciente, un reino que es mayor que el sentido limitado del ego que tenemos en nuestra existencia cotidiana.

Cuando viajamos al Mundo Superior, entramos en este superconsciente colectivo con acceso a nuestro destino personal, junto con el destino de nuestra familia o aldea o del trozo de tierra del que somos administradores, ya sea un jardín, una granja o un barrio de Nueva York.

Todas las sociedades tradicionales se refieren al Mundo Superior (al igual que muchas religiones), y cada una tiene su propio mapa para describir el terreno. Las representaciones cristianas del purgatorio y el paraíso definen los niveles de purificación a los que deben someterse los seres humanos antes de entrar en el paraíso. Los antiguos mapas del Tíbet ilustran los planos bardo, donde el alma de una persona expía sus errores y regresa a la luz tras muchas penurias y sufrimientos. Los Laika hablan de un paisaje de múltiples niveles (similar a lo que creen los tibetanos), habitado por las almas colectivas de minerales, plantas y animales, así como por las almas de nuestros antepasados. Cada uno de los cinco planos de este mundo existe en una relación diferente con el tiempo, y éste es el mapa que seguiremos de cerca en los próximos blogs

Los laika, como muchas otras religiones, creen que, tras la muerte, uno gravita de forma natural hacia uno de estos niveles del Mundo Superior en función de cómo haya vivido su vida. Si llegas en un estado no curado, por ejemplo, se te envía a los niveles inferiores, donde pasas por un periodo de limpieza y purga. Sin embargo, si vives conscientemente, puedes llegar a uno de los niveles superiores del Mundo Superior, donde no hay tiempo ni sufrimiento, sólo alegría.

Los seres que encontrarás en el Mundo Superior te darán la bienvenida y te guiarán para que encuentres los contratos sagrados que acordaste antes de nacer. Son acuerdos hermosos que has ignorado o no has sabido reconocer en tu vida porque te desviaron de tu curso los traumas, la ambición o tus expectativas de cómo deberías llevar tu vida. En el Mundo Superior, se te da la oportunidad de preguntar a tus padres celestiales cómo puedes empezar a vivir estos contratos sagrados de inmediato, y cómo pueden guiarte hacia tu mayor realización.

Todos los pasos que has dado en los últimos blogs han sido una preparación para este viaje: Has utilizado el proceso de recuperación del alma para sanar tu pasado y recuperar tu gracia; has explorado tu líneas de tiempo descubrir los patrones tóxicos que te han mantenido dentro de tu túnel de impulso de relaciones amorosas, poder, salud y carrera; y has sacrificado tu vacas sagradas para liberarte de tus creencias limitantes. Estas técnicas de sanación te han preparado para el viaje al Mundo Superior y te permitirán llegar allí en un estado sanado, libre para explorar la posibilidad de las líneas del destino que se encuentran fuera de tu túnel del impulso.

Antes de empezar, me gustaría que tuvieras en cuenta que éste es un viaje sagrado que requiere las debidas precauciones. Al igual que en el
viaje al Mundo Inferior
debes
abrir un espacio sagrado
y presentar tus respetos al guardián que custodia la entrada al Mundo Superior. (En el cristianismo, el guardián de la puerta es el Espíritu Santo, representado por una paloma de fuego; mientras que en el judaísmo, es el Mesías).

Los cinco planos que empezarás a conocer la próxima semana son: El Plano de la Gente de Piedra, El Plano de la Gente de Planta, El Plano de los Espíritus Animales, El Plano de los Antepasados y El Plano de lo Más Elevado.