– Decir la verdad – El primer sorteo

Di tu verdad es el primero de tres regalos. Este es un concepto hermoso cuando viene de un lugar sanado, un lugar de colibrí, un lugar de amor. Muchos de nosotros hemos tenido la dolorosa experiencia de que alguien nos dirija su «verdad» desde un lugar herido, desde viejas historias y emociones no resueltas, y podemos encogernos cuando alguien dice que quiere compartir su verdad con nosotros.

Cuando compartimos nuestra verdad, los chamanes sabemos que las palabras conllevan una gran energía, por lo que tenemos cuidado de decir nuestra verdad desde el amor. Lo hacemos reconociendo el tremendo poder de las palabras para herir o curar y que las palabras encierran un encanto porque las que elegimos para describir nuestra realidad se convierten en nuestra realidad.

Encontrar nuestra verdad y querer compartirla puede dar miedo. A veces tememos cómo reaccionarán los demás si nos compartimos abiertamente, revelando nuestra verdadera naturaleza. Cuando compartimos nuestra verdad desde el amor, no tenemos por qué sentirnos limitados por el miedo a que algo vaya mal. Cuando no compartimos nuestra verdad, no podemos vivir abierta y libremente, y empezamos a marchitarnos por dentro. En su lugar, elegimos desplegar valientemente nuestras alas y volar de punta a punta con gran espíritu para crear un
sueño sagrado
.

¿Cómo encuentras tu verdad? No necesitas buscarla fuera de ti, la encontrarás dentro cuando tu cabeza, tu corazón y tu alma hablen con una sola voz. ¿Cómo conocerás tu verdad? Es misterioso, difícil de articular, sutil. Insiste en que realices actos de valor y coraje que a veces dan miedo. Te anima a liderar desde la vulnerabilidad, a dejar al descubierto tu interior blando, a quitarte la armadura emocional. Es flexible pero valiente, suave pero imparable, y te permite ser quien eres, lo tomes o lo dejes.

El tipo de persona que lo toma o lo deja es alguien a quien a menudo admiramos, pero dudamos de que tengamos el valor de llegar a serlo. Viniendo de un lugar de miedo podríamos preguntarnos ¿qué pasa si las personas que nos importan deciden dejarlo? O, partiendo de un lugar curado, podríamos preguntarnos qué pasaría si ser nosotros mismos nos permitiera soñar grandes sueños, llenos de posibilidades, no lastrados por las opiniones de los demás, que nos recuerdan constantemente las probabilidades de éxito. Esto es lo que significa vivir sin miedo dentro de un sueño sagrado. Te conviertes en el chamán autorreferencial, sin trabas y sin miedo, siguiendo el camino que has elegido junto a esos otros viajeros intrépidos que también viven sus sueños sagrados.

¿Te atreves a decir tu verdad y a ser quien eres, lo tomas o lo dejas? En el blog de la semana que viene hablaré del segundo sorteo, encontrar la belleza en todas partes.